
El 15 de noviembre de 2017 la República Argentina perdió contacto con el submarino ARA San Juan y sus 44 tripulantes. Desde entonces esa fecha marcó una herida colectiva: la combinación de pérdida humana, misterio operativo y una larga búsqueda que terminó por transformar a esos 44 en símbolo de memoria y reclamo de justicia.
















